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Cuidar tus joyas desde el principio es fundamental. El contacto con jabones, aerosoles y lociones puede hacer que se oscurezcan. Para evitarlo, te recomendamos esperar unos minutos a que se sequen los productos antes de ponerte las joyas. El perfume puede dañar especialmente tus joyas debido a sus aceites esenciales y su contenido de alcohol, así que asegúrate de que se seque por completo dejándolo actuar entre 10 y 15 minutos antes de añadir cualquier joya. Y no olvides quitártelas si te aplicas algún producto durante el día.

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Nos encanta que luzcas tus joyas todos los días, pero para que se mantengan en perfecto estado, asegúrate de quitártelas cada vez que te laves, hagas ejercicio o te desinfectes.

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Lo ideal es guardar tus joyas en un lugar limpio y seco, como un joyero, un estuche forrado de tela o la bolsita que te proporcionamos . Así las protegerás de arañazos, salpicaduras y enredos. Aunque parezca exagerado, para quienes deseen conservar sus joyas impecables durante más tiempo, intenta guardar juntas las del mismo metal. Esto no solo facilita la organización, sino que también es una precaución más para evitar que se empañen.

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Nunca está de más pulir tus joyas cada pocos meses. Para las piezas chapadas en oro, basta con pulirlas suavemente con un paño de microfibra. Si se trata de plata, también puedes usar agua tibia con jabón, pero asegúrate de dejarla secar antes de guardarla.

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